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El cambio de neumáticos es esencial para garantizar la seguridad, el rendimiento y la eficiencia del vehículo. A continuación, te explicamos los principales factores a tener en cuenta para saber cuándo es el momento adecuado para sustituirlos.

1. Desgaste del dibujo

La profundidad mínima legal del dibujo de un neumático es de 1,6 mm, pero se recomienda cambiarlos antes de alcanzar este límite para mantener una buena adherencia y evitar el riesgo de aquaplaning. Puedes verificar el desgaste con:

• Indicadores de desgaste (TWI): Pequeñas marcas dentro de los surcos que muestran cuándo el neumático ha alcanzado el límite legal.
• Moneda de un euro: Si introduces una moneda en el surco y puedes ver la parte dorada, es momento de cambiarlo.

2. Antigüedad del neumático

Independientemente del desgaste, los neumáticos deben cambiarse cada 5 a 10 años, ya que el caucho pierde elasticidad y puede agrietarse, reduciendo su rendimiento. Puedes comprobar la fecha de fabricación en el flanco del neumático (código DOT).

3. Daños visibles

Si detectas alguno de estos signos, es recomendable acudir a un taller para su revisión y posible sustitución:

• Grietas o cortes en los laterales.
• Deformaciones o protuberancias.
• Desgaste irregular debido a problemas de alineación o suspensión.

4. Pérdida de adherencia y vibraciones

Si notas que el coche tiene menos estabilidad en curvas, mayor distancia de frenado o vibraciones en el volante, es posible que los neumáticos ya no estén en condiciones óptimas y necesiten ser reemplazados.

5. Cambio de estación

Si usas neumáticos de invierno, debes cambiarlos por neumáticos de verano cuando la temperatura supere los 7°C de forma constante. De la misma forma, los neumáticos de verano deben sustituirse por neumáticos de invierno cuando las temperaturas bajen de ese umbral.

El cambio de neumáticos depende de varios factores como el desgaste, la antigüedad y el tipo de uso que se les da. Sin embargo, hay algunas recomendaciones generales para garantizar la seguridad y el rendimiento del vehículo.

1. Desgaste del dibujo

La profundidad mínima legal del dibujo del neumático es de 1,6 mm, pero se recomienda cambiarlos antes de alcanzar este límite para mantener una buena adherencia y evitar el riesgo de aquaplaning.

Para comprobar el desgaste, puedes:

• Revisar los indicadores de desgaste (TWI) en los surcos del neumático.
• Usar una moneda de un euro: si al introducirla en el dibujo se ve la parte dorada, es momento de cambiarlo.

2. Antigüedad del neumático

Independientemente del desgaste, los neumáticos deben cambiarse cada 5 a 10 años debido al envejecimiento del caucho, que puede afectar su rendimiento. La fecha de fabricación se encuentra en el flanco del neumático con el código DOT, donde los últimos cuatro dígitos indican la semana y el año de fabricación.

3. Tipo de conducción y condiciones de uso

Si el vehículo circula con frecuencia en carreteras en mal estado, con carga pesada o en condiciones climáticas extremas, el desgaste de los neumáticos puede acelerarse y requerir un cambio más temprano.

4. Signos de desgaste irregular o daños

Es importante revisar visualmente los neumáticos con regularidad. Se recomienda cambiarlos si presentan:

• Desgaste irregular debido a problemas de alineación o presión incorrecta.
• Grietas, cortes o protuberancias en los laterales.
• Pérdida de adherencia en mojado o mayor distancia de frenado.

5. Cambio estacional

Si utilizas neumáticos de verano e invierno, debes cambiarlos según la temperatura ambiente:

• Neumáticos de invierno: cuando las temperaturas bajen de 7°C.
• Neumáticos de verano: cuando la temperatura supere los 7°C de manera constante.

Sí, se recomienda realizar una alineación después de cambiar los neumáticos para garantizar un desgaste uniforme, una conducción segura y un mejor rendimiento del vehículo.

Razones para alinear después del cambio de neumáticos

1. Evita el desgaste irregular

Una mala alineación puede provocar un desgaste desigual en los neumáticos nuevos, reduciendo su vida útil y afectando su adherencia a la carretera.

2. Mejora la estabilidad y seguridad

Una alineación correcta evita que el vehículo tienda a desviarse hacia un lado, lo que mejora la estabilidad y el control en la conducción.

3. Optimiza el rendimiento del combustible

Un vehículo desalineado genera mayor resistencia en el rodamiento, lo que aumenta el consumo de combustible.

4. Protege la suspensión y dirección

La alineación evita tensiones innecesarias en la suspensión y el sistema de dirección, previniendo averías y costosas reparaciones.

¿Cuándo es necesario alinear?

Se recomienda realizar la alineación:

• Después de cambiar los neumáticos, especialmente si los anteriores presentaban un desgaste irregular.
• Si el volante vibra o el coche se desvía al soltarlo en una carretera recta.
• Después de un impacto fuerte, como al golpear un bordillo o pasar por un bache profundo.
• Cada 10.000 a 15.000 km o al menos una vez al año, como parte del mantenimiento preventivo.

Elegir el neumático adecuado es clave para la seguridad y el rendimiento de tu vehículo. Para hacerlo correctamente, debes tener en cuenta los siguientes factores:

Medidas y dimensiones

Cada neumático tiene un código en su lateral que indica sus especificaciones. Por ejemplo, 205/55 R16 91V significa:

• 205 → Ancho del neumático en milímetros.
• 55 → Relación de aspecto (porcentaje de la altura respecto al ancho).
• R → Tipo de construcción (Radial).
• 16 → Diámetro de la llanta en pulgadas.
• 91 → Índice de carga.
• V → Código de velocidad máxima soportada.

Es recomendable consultar el manual de tu vehículo o la etiqueta en la puerta del conductor para verificar las medidas recomendadas.

Cómo leer un neumático

Los neumáticos incluyen información adicional relevante:

• DOT: Indica la fecha de fabricación (Ejemplo: 1223 = semana 12 del año 2023).
• Treadwear: Representa la durabilidad del neumático (un número mayor indica mayor vida útil).
• Traction: Clasificación del nivel de agarre en mojado (AA, A, B o C).
• Temperature: Indica la resistencia al calor (A, B o C).

Tipo de neumático según el terreno

Elige el neumático adecuado según el tipo de conducción y el clima:

• Neumáticos de verano: Ofrecen máximo agarre en seco y mojado, ideales para climas cálidos.
• Neumáticos de invierno: Proporcionan mayor tracción en nieve y temperaturas bajas.
• Neumáticos all-season: Versátiles para todo el año, combinan características de verano e invierno.
• Neumáticos off-road: Diseñados para terrenos irregulares y caminos de tierra o barro.
• Neumáticos de alto rendimiento: Mejoran la estabilidad y el agarre a altas velocidades.

Otras características importantes

• Índice de carga y velocidad: Deben ser compatibles con tu vehículo.
• Eficiencia energética: Neumáticos con baja resistencia a la rodadura ayudan a reducir el consumo de combustible.
• Nivel de ruido: Un menor nivel de ruido mejora el confort de conducción.
• Agarre en mojado: Clasificado de la A (mejor) a la G (peor).

Elegir entre neumáticos de invierno o de verano depende de las condiciones climáticas y del tipo de conducción que realizas. Cada tipo de neumático está diseñado para ofrecer el mejor rendimiento en su entorno específico.

Neumáticos de verano

Características:

• Optimizados para temperaturas superiores a 7°C.
• Compuestos de caucho más duros que proporcionan mayor estabilidad y agarre en carreteras secas y mojadas.
• Mejor eficiencia en el consumo de combustible gracias a su menor resistencia a la rodadura.
• Desgaste más lento en climas cálidos.

¿Cuándo elegirlos?

• Si vives en zonas con temperaturas moderadas o altas durante todo el año.
• Si conduces principalmente en carreteras secas o con lluvias ocasionales.

Neumáticos de invierno

Características:

• Fabricados con un compuesto de caucho más blando que mantiene la flexibilidad en temperaturas inferiores a 7°C.
• Surcos y laminillas profundas para mejorar la tracción en nieve, hielo y asfalto mojado.
• Mejor adherencia y frenado en condiciones frías y resbaladizas.
• Mayor consumo de combustible en comparación con los neumáticos de verano.

¿Cuándo elegirlos?

• Si vives en una zona con inviernos fríos, con temperaturas bajo los 7°C durante varios meses.
• Si conduces en carreteras con nieve o hielo con frecuencia.

¿Existe una opción intermedia?

Sí, los neumáticos all-season o neumáticos cuatro estaciones combinan características de los neumáticos de invierno y de verano, ofreciendo un rendimiento aceptable en ambas condiciones. Son una opción válida si vives en una región con cambios de temperatura moderados y no quieres cambiar de neumáticos según la temporada.